Moscú/Kiev.- Rusia anunció hoy la toma de Mariúpol y descartó tomar por asalto la planta de Azovstal, el último reducto de los defensores ucranianos de la ciudad portuaria, mientras que Kiev asegura que la urbe “sigue siendo ucraniana”.
“A día de hoy todo Mariúpol se encuentra bajo el control del Ejército ruso, de las milicias de la república popular de Donetsk. Y el territorio de la planta de Azovstal con el reducto de los nacionalista y mercenarios está bien bloqueado”, dijo el ministro de Defensa ruso Serguéi Shoigú, al presidente ruso, Vladímir Putin.
“El fin de la misión de combate para la liberación de Mariúpol es un éxito”, consideró éste.
Vadym Boychenko, el alcalde de la castigada ciudad, destruida casi en su totalidad tras seis semanas de asedio, negó que los rusos controlen Mariúpol y aseguró que “sigue siendo ucraniana”.
En lo que sería el primer gran éxito en la campaña militar rusa en Ucrania, Shoigú admitió que la toma no es absoluta, ya que “más de 2,000” soldados ucranianos, mercenarios y combatientes del batallón de Azov resisten aún en la zona industrial de la planta Azovstal, además de unos mil civiles, según las autoridades de Ucrania. Kiev temía un ataque final que redujera a cenizas la planta, pero Putin ordenó hoy cancelar la orden de asalto a la fábrica.
No obstante, ordenó bloquear la zona industrial de la acería de tal modo que “no pase ni una mosca”. Al respecto, el asesor del alcalde de Mariúpol, Petro Andryushchenko dijo a través de Telegram que las tropas rusas continuaron este jueves con su bombardeo contra la planta metalúrgica de Azovstal.
FF