Investigadores del Instituto de Astronomía Pan-STARRS de la Universidad de Hawai y el Observatorio WM Keck observaron a la supergigante roja durante su últimos 130 días antes de su detonación mortal.
“Este es un gran avance en nuestra comprensión de lo que hacen las estrellas masivas momentos antes de morir”, afirmaron los científicos.
El descubrimiento aparece en la publicación especializada “The Astrophysical Journal”.
Pan-STARRS detectó por primera vez la estrella masiva condenada en el verano de 2020 a través de la gran cantidad de luz que irradia la supergigante roja. Unos meses después, en otoño de 2020, una supernova iluminó el cielo.