Ciudad de México.- Continúa impune el caso de la estudiante de la UNAM, Yaretzi Hernández Fragoso; quien falleciera el pasado 7 de enero al chocar el Metro en la línea tres, que dejó un saldo de más de cien pasajeros heridos.
Cesar Hernández, padre de la víctima, denunció que, a casi un mes del choque entre dos vagones, la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum continúa sin cumplir su promesa de que se haría justicia.
“Se quedó en un solo discurso el apoyo de la jefa de Gobierno”, sostuvo el padre de Yeretzi manifestó su inconformidad por la investigación de la fiscalía capitalina que a la fecha no tiene a los verdaderos culpables.
El pasado viernes la Fiscalía de la Ciudad de México, anunció la detención del maquinista por conducción negligente y apuntó como principal motivo del accidente a la quema y el corte intencionado de los cables de comunicaciones en dos registros de conexión que tienen que ver con la señalización y el pilotaje automático de la estación Potrero.
La Fiscalía señala en su investigación que el conductor no respetó el límite de 35 kilómetros por hora, velocidad indicada ante una conducción de emergencia como esa que asegura que los operadores puedan responder a tiempo ante cualquier imprevisto.
En el comunicado de la dependencia se hace referencia a que un día antes del choque, el personal del Metro recibió un reporte sobre fallos en la señalización de la línea y se indicó una alerta para circular a baja velocidad. “El conductor del convoy 24 no se apegó a los lineamientos contenidos en sus manuales técnicos, excedió el límite de velocidad en conducción manual restringida; y cambió a pilotaje automático cuando está prohibido bajo marcha de seguridad”, explicó Ulises Lara, vocero de la Fiscalía. De acuerdo a la información de la caja negra del tren, el accidente se produjo a las 9.06 horas, entre las estaciones de Potrero y La Raza.
Según la Fiscalía capitalina, no existe ninguna evidencia de que el conductor realizara un frenado de emergencia.
La familia de Yaretzi Hernández denuncia que durante las pesquisas tampoco tuvieron acceso a la carpeta de investigación como parte implicada del caso. Los padres piden que se “investigue de manera transparente” las causas del trágico accidente y que un juez determine de quién es la responsabilidad.
“A pesar de ese cambio de manual a automático el conductor no tenía conocimiento de que había un tren parado enfrente, no servía el sistema de comunicación y tampoco se activó ningún sistema para requerirle o advertirle al conductor que debía frenar porque había otro convoy en mitad de la vía”, apunta el abogado de la familia, Cristopher Estupiñán.
“El problema de fondo es que no hubo un debido control, ni una debida comunicación entre el Centro de Comando, el conductor y tampoco en el sistema de comunicación entre los conductores de los trenes (…) El sistema de pilotaje automático funciona para que los trenes frenen con 200 metros de distancia entre uno y otro, si eso no pasó, es porque el sistema de pilotaje tampoco servía”, agrega el litigante.
El abogado de los padres de Yaretzi argumenta que deben de fincarse más responsabilidades por lo sucedido y contemplan aportar su propio peritaje a las indagatorias. “Ni la dirección de Mantenimiento, ni la subdirección General de Operación, la subdirección general de Mantenimiento, ni la dirección cumplieron con su función de prevenir y garantizar la seguridad del servicio y se lo achacan al último de la cadena, el conductor”, señala. “A pesar de que las comunicaciones estaban fallando, se tomó el riesgo de brindar el servicio”, insiste.
La familia además de su inconformidad con las investigaciones manifiesta que tampoco fueron notificados de la audiencia de vinculación a proceso del conductor, algo que su representante legal califica de “inconstitucional”, por lo que presentarán en los próximos días la nulidad de dicha audiencia.
FF