El gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca, dijo que la Secretaría de Salud atiende este problema de salud que se presenta en escuelas del estado
Verónica Jiménez, corresponsal
México.- Diversos brotes del virus Coxsakie, obligaron a que escuelas analicen la pertinencia de cerrar sus puertas y suspender las clases para evitar que sigan los contagios, mientras que la Secretaría de Salud del gobierno del estado, trabaja en la contención de esta enfermedad.
Son estudiantes de educación básica, los mayormente afectados por estos brotes, confirmó la secretaria de salud, Vanessa Escalante Arroyo, pero descartó que haya cierres de escuela.
La funcionaria estatal, advirtió que fueron detectados 105 brotes de este virus, de los cuales, 64 han sido en escuelas y han alcanzado a 390 estudiantes.
Por su parte, el secretario de educación, Natividad Castrejón, apuntó que la Secretaría de Salud mantiene acciones sanitarias para contener el virus y su contagio.
Ratificó que son 64 escuelas en las que se han detectado casos, sin embargo, reiteró que no prevén el cierre y mucho menos aislar a los niños afectados.
Indicó que son niños de preescolar y primaria quienes se han enfermado por este virus en Tizayuca, Tulancingo, Pachuca y Tula.
Cabe destacar que el virus coxsackie, se caracteriza por provocar sarpullido en manos, pies y alrededor de la boca, y generalmente afecta a los niños.
La funcionaria explicó que la forma de contagio es como cualquier enfermedad de las vías respiratorias, por lo que pidió a los padres de familia instruir a sus hijos para que cuando estornuden lo hagan cubriéndose la boca con la parte interna del codo, además de usar cubrebocas de preferencia.
Ante el número de casos, hay alarma epidemiológica en el estado por los brotes registrados en Pachuca, Tulancingo de Bravo, Tizayuca y San Salvador.
Este padecimiento es similar a las enfermedades respiratorias y se transmite por saliva, por lo que llamó a la población a respetar las medidas sanitarias.
“Estamos alertas, no es algo que pueda levantar una alarma significativa en el cual el niño estuviera en riesgo, sin embargo, necesitamos hacer un control tanto de la familia, en lo sanitario, como el resto de las niñas y niños”, explicó.
De acuerdo con Salud los síntomas, que incluyen fiebre alta, malestar general, dolor de garganta, úlceras en la boca y salpullido en las extremidades, se presentan alrededor de los tres días posteriores al contagio, y desaparecen en un periodo de entre cinco y ocho días a partir de haber iniciado.
Es recomendable hidratar a los menores y, en caso de haber úlceras en la boca, evitar bebidas ácidas, pues pueden provocar dolor.
FF/LP