Con dos récords del mundo y la caída de Estados Unidos en el relevo 4×100 estilos masculino, cerró la actividad en la natación de los Juegos Olímpicos París 2024.
Luego de una semana de emociones, triunfos, alegrías y hasta lágrimas, la natación olímpica, una de las disciplinas más atractivas del calendario, puso punto final de manera épica.
La primera en lucirse en la alberca olímpica de La Defense fue la sueca Sarah Sjoestroem, poseedora del récord del mundo y olímpico en los 50 metros libres y quien logró el oro.
Sjoestroem registró 23.71 segundos para quedarse con la medalla de oro, con apenas 26 centésimas de ventaja sobre la australiana Meg Harris; la china Yufei Zhang (24.20) logró el bronce.
Después tocó el turno a los 1,500 metros estilo libre masculino, donde la gente se puso de pie para reconocer la brillante competencia del estadounidense Bobby Finke.
Con total dominio desde que saltó a la alberca y hasta que finalizó, siempre en el liderato, Finke cronometró 14.30.67 minutos para lograr el oro y con marca mundial.
Superó la marca de 14:31.02 del chino Yang Sun, la cual impuso en agosto de 2012, y venció por casi 4 segundos al italiano Gregorio Paltrinieri, quien se quedó con la plata, y al irlandés Daniel Wiffen, bronce.
Sorpresas con broche de oro
Las últimas dos competencias fueron los relevos 4×100 estilos en ambas ramas, y en la varonil se dio una sorpresa, pues China acabó con el dominio de 10 oros seguidos de Estados Unidos.
El cuadro de las “barras y las estrellas” dominaba la prueba desde Los Ángeles 1984, pero esta vez los chinos Xu Jiayu, Qin Haiyang, Sun Jiajun y Pan Zhanle los destronaron.