Verónica Jiménez, corresponsal
Hidalgo.- Es el poliducto Tuxpan-Tula el más ordeñado en diversos tramos que corren desde el norte de Hidalgo hasta su llegada a la refinería Miguel Hidalgo de Tula, ubicado en el sur de la entidad, por grupos que burlan a la autoridad a través de “huachitúneles”, viviendas y bodegas fachada, además de usar equipo táctico sofisticado y hasta drones de ataque.
La industria del huachicol no tiene freno, una muestra de ello es que, en los primeros días de enero de 2024, fueron detectadas 10 tomas clandestinas por donde se extraían hidrocarburos, especialmente gasolinas.
Ello, a pesar de que vigilan día y noche los ductos de Petróleos Mexicanos.
Los municipios donde fueron detectadas estas tomas clandestinas son: Epazoyucan, Mineral de la Reforma, San Agustín Tlaxiaca, Ajacuba y Tetepango, municipio muy cercano a la Refinería Miguel Hidalgo, en Tula.
Es el poliducto Tuxpan-Tula, el que ha sufrido más atentados a los que incluso, las bandas delictivas ya se conectan desde túneles que llevan a viviendas o bodegas.
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