México.- Los aumentos al salario mínimo, en los últimos 17 años, no han mejorado los niveles de informalidad y la pobreza laboral alcanza al 38.3 por ciento de la población con empleo, afirmó Jorge Sales Boyil, experto laboral, quien añadió que además de los incrementos que reconoció, históricamente han existido, deben estar acompañados de políticas públicas que mejoren la calidad de vida de los trabajadores.
“No es que esté mal que el salario mínimo suba, el salario mínimo, no obstante los índices de recuperación tan altos que está teniendo, no está sirviendo para mejorar los índices de pobreza laboral, ni para mejorar la tasa de informalidad. ¿Eso que hace patente? Que no se trata sólo de estar incrementando el salario mínimo, se trata de desarrollar políticas laborales más amplia, como pensar en la seguridad básica universal por ejemplo, o en la renta básica universal, lo que no está bien es que en México, un trabajador que está en el mercado formal sea pobre”.
En ese sentido propuso que se debería pensar en alternativas como incentivos a la formalidad, ya que afirmó el estar en ella, parece más un gravamen y en la informalidad un incentivo. Añadió que un impuesto al consumo, podría ser también considerado.
El especialista, afirmó que el objetivo del salario mínimo es que con él se alance el pacto social entre los factores de las producción y los trabajadores, el socio consultor de Littler México, añadió que las personas debieran tener seguridad social universal, solo por el hecho de ser mexicanos, tal y como lo marca la constitución al margen de su situación laboral.
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