En Austria, activistas ecologistas rociaron este martes con un líquido negro el famoso cuadro “Muerte y vida” del pintor austriaco Gustav Klimt, informó el Museo Leopold de Viena. Además, los jóvenes intentaron pegarse al marco de la pintura, pero fueron retenidos.
El portavoz del museo, Klaus Pokorny, informó que los restauradores ya están trabajando para determinar si la pintura, que está protegida por un vidrio, ha sido dañada
Militantes del grupo llamado “Última Generación” reivindicaron la acción, denunciando que “los nuevos pozos de petróleo y gas son una sentencia de muerte para la humanidad”. Además, aseguraron que quisieron intervenir el cuadro (por su nombre) como metáfora de su denuncia.