México – La Organización Mexicanos Primero, informó que el cierre por 18 meses de las escuelas y la falta de asistencia de las niñas, niños y adolescentes, afectó su formación y la educación asistencia a través del televisor, no les permitió incrementar su aprendizaje, sino además mostraron un retroceso en habilidades como matemáticas y lectura. Advirtieron que los resultados de su estudio Equidad y Regreso, demuestran que la única forma de aprender con solidez, es en las escuelas y de manera presencial. David Calderón , Presidente ejecutivo del organismo señaló que factores como la falta de dispositivos y el modelo no es óptimo para el aprendizaje. Indicó que para resarcir estas afectaciones, al menos deben asistir los menores 5 horas por día, durante 5 días a la semana.
“Los datos que hoy compartimos lo gritan: a los alumnos de básica, la oferta a distancia no les gusta, no cuentan con dispositivos, y sobre todo no les funciona para aprender. En México, nuestra opción verdadera para mantener la escuela abierta es restringir los riesgos. Hay que ser realistas, pero también congruentes: las soluciones de cuidado de la salud y de aforo son más sencillas, efectivas y baratas que escalonar. Se aprende hasta con una presencia tan limitada como una vez a la semana, pero el objetivo es claro: a este punto, toda niña, niño y adolescente merece y necesita ir cinco días a la semana a su escuela.”, dijo Calderón.
Afirmaron que es indispensable conformar espacios seguros para los menores y en estos meses de ausencia, no se ha concretado, para que los niños acudan a la escuela las 5 horas, 5 días a la semana son necesarias 5 condiciones, que las autoridades deben garantizar : agua y jabón y sanitizantes; ventilación con aire natural, distancia y cubrebocas; apoyo socioemocional con el juego y conciencia que hace falta; refuerzo en los aprendizajes fundamentales, donde se han diagnosticado retrocesos y una participación activa que implica escuchar a la comunidad para que las soluciones sean solidarias y sustentables. Indicaron que no basta el llamado de la autoridad, si antes, no se garantiza la seguridad en los planteles.
“Sólo hacer la cantaleta de “regresen, regresen”, sin dar confianza en los hechos, y sin un propósito, es estéril. Si logramos que todas las familias capten que el aprendizaje es algo vivo -y que no se queda detenido con el marcador en ceros, sino que decrece, que es como una grave desnutrición en las capacidades de la generación joven, y que por lo tanto es necesario un plan de recuperación vigoroso- entonces sí hay esperanza. La incapacidad de la autoridad no debe implicar la inacción de los demás”, señaló.
Por su parte, Laura Ramírez Directora de Activación de Agentes de la organización , reconoció que por la variante Omicron y los altos niveles de contagio, es necesario que cada comunidad escolar pueda tomar decisiones, recordó que el regreso es un proceso.
“Como una medida emergente, suspender unos días el regreso presencial a clases, mientras pasa la emergencia, en un estado determinado, en una comunidad incluso determinada, puede ser una medida necesaria en un momento, el asunto es que no se nos olvide que necesitamos esa presencialidad gradual, que una vez vaya pasando la emergencia, regresemos, que haya estrategias para un regreso seguro, si necesitamos regresar y que mientras los niños no puedan ir porque estamos en esta emergencia concreta hay opciones para que las niñas, los niños puedan aprender, que estén en contacto con sus maestras, con sus maestros, la televisión no está funcionando, lo muestran los datos”, finalizó Ramírez.
JJ