Gerardo Cedillo, reportero
Estado de México.- “Tíralo a un canal”, fue la frase que más tomó en cuenta y peso para que un juez declarara la prisión preventiva a Lucio David de 18 años y Diana Jaciel, de 21, padres del bebé abandonado en Tultitlán, Estado de México, que ya fueron trasladados a centros de reinserción social.
Un juez decretó imponer la medida cautelar tras la audiencia inicial realizada este domingo en juzgados de Cuautitlán.
El impartidor de justicia les dictó esta medida por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa. Asimismo, se fijó para el próximo 20 de febrero su siguiente audiencia.
Al término de la ausencia el abogado de Lucio, Abel García Montiel, declaró que su cliente se siente “asustado” y “arrepentido” por lo sucedido.
Además hizo un llamado a criminalizar la “pobreza” que supuestamente sufre el joven.
“Hay que entender su situación económica, su pobreza extrema. No podemos condenarlo por ser pobre”, señaló el defensor, quien adelantó que apelará por un adecuado proceso.
Mientras el Ministerio Público narraba la forma en que nació el pequeño en una panadería de La colonia Fuentes del Valle, Diana agacho la cabeza y la apretó contra sus rodillas.
Los imputados Diana y Lucio limpiaron sus lágrimas en diversas ocasiones durante la audiencia que se extendió por un par de horas.
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