Ciudad de México.- Luego de que este fin de semana el Consejo de la Judicatura capitalino ordenara la reanudación inmediata de todos los servicios judiciales y administrativos en el Poder Judicial de la Ciudad de México (PJCDMX) afectados por un paro de labores que iniciaron desde el pasado 29 de mayo la base trabajadora en rechazo al 5 por ciento directo al salario que se les otorgó, los manifestantes determinaron reanudar labores a partir de este lunes.
Tras más de un mes de paro, acordaron con autoridades locales la apertura de los juzgados y oficinas administrativas.
Como parte de los acuerdos, se confirmó la entrega de dos bonos: uno por 29 millones de pesos a distribuirse en diciembre entre más de 10,000 trabajadores, y otro pendiente de definir en fecha y monto.
En una reunión de casi cuatro horas celebrada este viernes 4 de julio, los representantes laborales y autoridades del PJCDMX, junto con funcionarios del Gobierno capitalino, convenieron en levantar el paro, programando el reinicio de funciones para el lunes.
El aumento salarial del 10 %, una demanda central del movimiento, no fue concedido. Las autoridades acordaron revisar el presupuesto y definir viabilidad antes del 15 de septiembre, sin comprometerse a cumplir la cifra exigida.
La huelga había paralizado diversos procesos judiciales, afectando audiencias por divorcios, pensiones y casos de violencia intrafamiliar, lo que generó preocupación por la saturación del sistema judicial. Previo al convenio, el Consejo de la Judicatura ordenó la reanudación inmediata de labores, amenazando con descontar nómina y aplicar sanciones.
Tras el acuerdo, el PJCDMX se comprometió a iniciar mesas técnicas quincenales para planificar el presupuesto de 2026, con participación de representantes laborales, garantizar la base laboral y evitar cambios administrativos o económicos de represalia
Impacto y contexto
* El paro dejó al borde del colapso el otorgamiento de justicia en la capital, detenía procedimientos clave y saturó audiencias atrasadas.
* Aunque no hubo incremento salarial inmediato, el bono y la basificación podrían ser consideradas victorias parciales.
* El desafío pendiente es cómo materializar el crecimiento salarial sin comprometer la estabilidad del presupuesto.
Jorge Sánchez, reportero
SC/