La española Garbiñe Muguruza, quinta raqueta del mundo, aseguró este martes que a los 28 años se siente en mejores condiciones para manejarse como profesional y buscar mejores posiciones en el tenis mundial.
“Cambié mi compostura a la hora de afrontar malos momentos, eso se aprende con la edad y la experiencia; no hay un atajo para saber manejar los momentos difíciles y ahora me noto más preparada para manejarme a mí misma mejor”, dijo a una pregunta de Efe luego de clasificarse a la final de la WTA Finals.
Con un servicio impecable, Muguruza derrotó a su compatriota Paula Badosa por 6-3, 6-3 en la semifinal del torneo y se convirtió en la primera jugadora de su país en una final de maestras en este siglo.
Al referirse a los mejores momentos de su carrera, cuando ganó el Roland Garros y Wimbledon en 2017, año en el que llegó al número uno del mundo, Muguruza dijo que la diferencia ha sido el camino recorrido.
La española disputará el título ante la mejor entre la estonia Annet Kontaveit y la griega Maria Sakkari.
“Desde el papel y la televisión, igual si (me ponen favorita), pero desde mi posición no porque somos la ocho mejores jugadoras; casi estaba fuera y ahora estoy en la final. Me queda un partido más, sea con la que sea, a ver qué pasa”, apuntó.
Muguruza comenzó la WTA Finals con una derrota ante la checa Karolina Pliskova, pero se levantó con triunfos sobre la también checa Barbora Krejcikova y la estonia Kontaveit y este martes mostró su mejor momento de forma.
“Hoy he jugado bien, se ha visto una gran versión mía, con ganas, con motivación para cerrar una temporada fantástica. Es un buen momento, por eso sonrío”, agregó.
Muguruza apenas celebró la victoria sobre Badosa y ante los medios confesó que lo hizo por respeto a su compatriota.
“He estado comedida por respeto a Paula y porque me queda un partido más; va a ser muy difícil mañana, quiero estar concentrada y no dejarme ir en ningún momento”, concluyó.