Ernesto Gloria, reportero
México.- La próxima administración enfrentará diversos retos en materia de vivienda, en especial por el proyecto de vivienda social para jóvenes, por lo que deberá ampliar la visión a otras áreas hasta ahora no consideradas, señaló la Subsecretaria de ordenamiento Territorial y Agrario en la SEDATU, Edna Vega Rangel, al participar en el foro “Vivienda Justa y Prosperidad Compartida”, organizada por el Infonavit y un diario Español, El País, dijo que será necesario reconocer la participación de todos, sin limitar al Estado, y tener una visión más integral, reconociendo que lo más indispensable será la participación de gente, en un contexto donde las grandes desigualdades están presentes y la mayoría de las acciones de vivienda están dirigidas al beneficio personal y no al de las personas.
“A partir de la experiencia de la presente administración, se tiene la necesidad de crear nuevos esquemas de atención, orientados a los segmentos de población específica: la población no derecho habiente; jóvenes sin acceso a crédito; vivienda en renta y más. Quiere decir que este nuevo programa encabezado por la doctora Sheinbaum, plantea una gran diversidad de grupos de atención, de esquemas de institucionalización, de programas, y esto la suma de esfuerzos de todos los actores”:
La especialista dijo que en esta administración se disminuyeron dos carencias en materia de vivienda : los calidad y espacios y el de las de servicios básicos para la vivienda.
“En este sentido, el indicador de carencia por calidad y espacios en 2018 fue de 11% , en tanto que el indicador por carencia de acceso a servicios básicos en ese mismo periodo fue de 19.3%. Con las medidas adoptadas en materia de vivienda para combatir la desigualdad social, impulso de la política de la vivienda adecuada y las acciones en conjunto con los organismos nacionales de vivienda, para otorgar subsidios y créditos; para 2022 el indicador por carencia de calidad y pasos de vivienda disminuyó 9.1% y el indicador de carencia a servicios básicos en un 17.8%”.
Con ello dijo casi 2 millones de personas han dejado de vivir con carencia por calidad y espacios en su vivienda y cerca de 1.5 millones de personas dejaron de presentar carencias por acceso a servicios básicos.
La Subsecretaria dijo que la vivienda se vuelve el espacio detonante para el cumplimiento de otros derechos y en un elemento indispensable para la reducción de grandes brechas de desigualdad qué hay en el país. Señalo que aunque la vivienda es un derecho de segunda generación a través de ésta, se garantizan las condiciones de seguridad mínimas, que dan pauta al cumplimiento de otras necesidades básicas, como el pleno ejercicio de sus libertades y del desarrollo integral de las personas y comunidades, ya que dependiendo de sus características y ubicación se facilita o dificulta el acceso a otros derechos como educación, cultura, recreación, trabajo y otras. La vivienda añadió se vuelve un determinante para el disfrute y acceso al espacio.
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