No dejar escapar ni una sola oportunidad es a lo que están dispuestos los grandes nombres de la Vuelta a España y desde el primer momento han dejado claro que están hambrientos por hacerse tanto con victorias parciales como lucir ‘la Roja’.
Tras las dos primeras etapas, la clasificación general de la Vuelta ya presenta a buena parte de los nombres que deben estar hasta el final peleando en la parte alta por el podio final de Madrid. El belga Remco Evenepoel (Soudal-Quick Step) un año y tres días después de enfundarse su primera ‘Roja’, que terminó haciendo suya en propiedad, volvió a ser el líder de la carrera y lo hizo ganando en Arinsal.
Entre los diez primeros ya están el español Enric Mas (Movistar), el danés Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma) y su compañero el esloveno Primoz Roglic, o el colombiano Santiago Buitrago (Bahrain), entre los que todos apuntaban, y muy cerca el resto.
Las diferencias que marcó la polémica contrarreloj por equipos de Barcelona del sábado por las adversas circunstancias en las que se disputó, todavía no ha dado tiempo a que se difuminen. Aunque habrá que ver si al final no resultan más decisivas de lo esperado en primera instancia.
Ya en la escapada del día se metieron algunos de los hombres que a priori aparecían como alternativa al poder de los líderes, como el alemán Lennard Kamna (Bora-Hansgrohe) o el italiano Damiano Caruso (Bahrain).
Pero por detrás los grandes favoritos querían probar a sus adversarios y cada equipo buscó su momento y lo hicieron desde las primeras rampas del primer puerto de entidad de este 2023. Las rampas de Ordino se convirtieron en el banco de pruebas.
El primero en entrar en acción, sucediendo a un trabajo tan intenso como inesperado del DSM tratando de controlar a los escapados, fue el UAE Emirates con Jay Vine en favor de Juan Ayuso.
Al movimiento del australiano le siguió la elevación del ritmo de los Jumbo-Visma de Jonas Vingegaard y Primoz Roglic. Y para dar un punto más se pusieron a tirar los Soudal-Quick Step de Evenepoel.
Los mejores habían entrado en acción a las primeras de cambio. Todos querían saber como estaban de fuerzas, ellos mismos y por su puesto sus rivales.
Los ataques de uno y otro, Ayuso se prodigó un poco más que el resto, se sucedieron aunque al final hasta una docena de corredores llegaron a los metros finales con opciones de ganar la etapa. El acelerón de Remco fue inapelable y los demás trataron de limitar daños y finalmente solo cedieron un segundo sobre el de Aalst, además de que sumó la bonificación de 10 segundos. Para Vingegaard fueron 6 segundos y para Ayuso 4.
Los que no estuvieron donde se les esperaba fueron los dos hombres fuertes de Ineos Grenadiers, Geraint Thomas y Egan Bernal, ambos cedieron 47 segundos con el belga.