El pundonor del mexicano Raúl Jiménez, autor de un gol para el Fulham y causante de peligro en la etapa final del encuentro, no pudo frenar el renacer del West Ham, en el estreno de la era Graham Potter en la ‘Premier‘, tras la destitución de Julen Lopetegui, que se impuso por 3-2.
Una volea del español Carlos Soler, oportuno y certero para aprovechar el error tremendo del brasileño Andreas Pereira con un pase a nadie al borde de su área a la media hora, inició la reacción del conjunto local que, en sólo dos minutos y 11 segundos, marcó dos goles.
Del 30:20 al 32:31. Del citado 1-0 de Soler al 2-0 de Soucek, que remachó dentro del área una buena jugada colectiva y un pase de Wan-Bissaka, para acercarse a una victoria necesaria, después del despido del técnico español tras los nueve goles en contra en dos jornadas ante el City y el Liverpool.
El ‘Chino’ ya hace de las suyas en Bélgica
El Fulham redujo la diferencia en el minuto 50, con el 2-1 de Raúl Jiménez, que remachó un centro de Iwobi, pero, un cuarto de hora después, un fallo de Bernd Leno, presionado por Danny Ings, regaló el 3-1 a Lucas Paquetá.
Aún lo inquietó el Fulham, con el 3-2 de Iwobi, con un remate de Raúl Jiménez que despejó Fabianski, con unas cuantas ocasiones que pusieron al filo de la caída al West Ham, ganador por 3-2 y en la duodécima posición. Su rival de este martes es noveno.
Jota rescata al Liverpool
La entrada decisiva de Diogo Jota más allá de la hora de partido, goleador en tan solo unos segundos sobre el césped y protagonista de otras dos ocasiones paradas de forma extraordinaria por el portero Matz Sels, rescató al Liverpool de la derrota y sofocó la revolución de la ‘Premier’ que propuso el Nottingham Forest hasta el 1-1.
Aún con su cuarto empate en las últimas siete jornadas, la igualada fue un respiro para el equipo ‘red’, al filo de la caída durante muchos minutos, sin lanzar ni un solo remate entre los tres palos hasta la aparición del extremo portugués: entró junto a Tsimikas en el minuto 65 y 9 segundos y ambos combinaron en el 1-1 en el minuto 65 y 23 segundos para nivelar el choque y relanzar a un Liverpool cuestionado hasta entonces.
Desde el minuto 8 fue por detrás en el marcador. La exigencia de la visita a The City Ground era evidente. El 1-0 en contra, en la primera ocasión local, fue la confirmación. Una prueba de carácter y de fuego para el liderato del equipo de Arne Slot, cuya primera posición está a debate desde hace semanas, junto cuando se pensó que ya era prácticamente campeón.
AJGD