Osasuna firmó un emocionante empate ante el Barcelona (2-2) gracias al gol del argentino Chimy Ávila en los últimos que hundió a un conjunto culé que no vence en Liga desde hace tres jornadas y que se vio sobrepasado por su rival durante algunos tramos de un partido muy entretenido.
Golpeado por las lesiones, pero aún idolatrado en Pamplona, la irrupción del “Chimy” volvió a ser decisiva; el argentino marcó desde fuera del área, cuando parecía que el Barcelona se encaminaba al triunfo, cuando llevaba poco más de un cuarto de hora sobre el terreno de juego.
La sed de victoria de Osasuna empujó al equipo a salir a por todas delante de su afición desde el inicio, sabedores de las bajas de un rival que llegó a Pamplona sin apenas margen de error tras la eliminación de la Copa de Europa y su complicada situación liguera.