Redacción deportes, 26 abr (EFE).- El italiano Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid, lamentó la derrota en la final de la Copa del Rey, en la prórroga ante el FC Barcelona (3-2) ya que estuvieron “muy cerca” en un encuentro en el que lo han “intentado hasta el final” tras “una segunda parte muy buena”.
“Lo hemos intentado hasta el final, estuvimos muy cerca. Hicimos una segunda parte muy buena. El partido ha sido competido y equilibrado”, dijo Ancelotti en RTVE.
“Modric, Arda Güler rindieron muy bien… Lo hicimos muy bien en la segunda parte. Encajamos un gol un poco raro, a la espalda, algo descolocados. Pero esto puede pasar contra el Barcelona”, añadió Ancelotti.
La entrada a la final de Kylian Mbappé tras el descanso, en lugar de un desaparecido Rodrygo, cambió la cara del Real Madrid que llegó a levantar el partido al Barcelona, con el esfuerzo titánico de jugadores como Fede Valverde y Jude Bellingham más la aportación desde el banquillo de Arda Güler y Luka Modric, que dejó un error que costó el trofeo en la prórroga.
Mbappé lideró una reacción insuficiente
Así jugó el Real Madrid la final de la Copa del Rey ante el Barcelona (3-2):
Carlo Ancelotti mando a Thibaut Courtois (7): Que se estrenó en la competición en la final, siempre decisivo los días que se ponen en juego los títulos y con una precipitación en el tanto que mandó el partido a la prórroga. Tras una buena intervención a un testarazo de Koundé, nada pudo hacer ante el disparo a la escuadra de Pedri en el primer gol.
Muy seguro a dos disparos lejanos de Raphinha y con dos estiradas salvadoras a Yamal. El único lunar lo dejó en el minuto 84 cuando se precipitó al abandonar su zona al ver que Rüdiger perdía la carrera con Ferran Torres. Superado en el mano a mano desprotegido. Nada pudo hacer en el disparo colocado de Koundé que decidió el partido .del conjunto de Ancelotti
. Lucas Vázquez (5): Titular en la que se perfila como la última o penúltima final de su carrera en el Real Madrid, según el papel en el Mundial de Clubes, encaró la marca de una de las claves del buen año del Barcelona, Raphinha. Un golpe abajo a los cuatro minutos fue el aviso del marcaje que le esperaba al brasileño. Se olvidó de su punto fuerte, las incorporaciones ofensivas y se vació en defensa. Impreciso en los balones en largo y sustituido a los 55 minutos.
El equipo no pudo soportar los embates del conjunto blaugrana que al final le quitó la alegría a los dirigidos por Ancelotti.
AJGD