Josefina Claudia Herrera
México.- Suzette Celaya Aguilar nació en 1982, es licenciada en Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Sonora, es maestra en Ciencias sociales y realizó un diplomado en Escritura creativa en la SOGEM, la Sociedad General de Escritores de México.
Su labor periodística y de investigación, además del estilo desarrollado en Nosotras, revela realidades respecto a la violencia, el despojo y la ruina.
Suzette Celaya con su novela Nosotras ganó la tercera edición del Premio Primera Novela 2023 de Amazon y el Gobierno de Coahuila.
En esta entrevista de semblanza en Enfoque Noticias Suzette nos cuenta sus inicios, cómo encontró y desarrolló la historia. Además nos invita a saber si se puede vivir de ser escritora.
Les cuento parte de la historia.
En Nosotras, Suzette Celaya relata el momento exacto en el que un pueblo desaparece, sin que a nadie en el mundo le importe, sin que nadie lo vea como una gran tragedia.
Es también un amanecer lleno de polvo y del graznido de los zopilotes, de sembradíos secos, vacas que paren en medio de la nada y mujeres a las que se saquea y abandona como a la propia tierra.
Celaya Aguilar cuenta la vida de Violeta, la protagonista de Nosotras, quien es el personaje-guía que representa una resistencia ante los agentes estatales que quieren llevar a cabo el proyecto de la presa y ante el olvido de los propios pobladores, quienes aceptan abandonar ese lugar al que consideran sórdido y viejo.
Al poblado envían a un joven periodista para registrar los sucesos que acaecen ahí en el periodo de la construcción de la presa.
A lo largo de sus páginas, Nosotras se mantiene entre el realismo y la fantasía, entre la violencia de género y la autogestión, entre la verdad y la mentira de lo que se dice del pueblo.
Me recordó la forma de escribir Jorge Ibargüengoitia, de Juan Rulfo.
Al final, Nosotras es un texto que remarca la importancia de la comunidad y su autogestión para hacer efectivos los derechos que le son propios a un pueblo que merece pervivir a pesar de que se le entierre bajo agua.
“La muerte de un pueblo es también el fin del mundo. El fin de los tiempos para todos aquellos que, sin pasado ni futuro, sin muertos ni casa natal, abandonan lo único que conocen. Que nos quiten el territorio es también una forma de muerte”.
FF